El tratamiento para el bruxismo proporciona un gran alivio del dolor de mandíbula, dolores de cabeza y otros problemas desagradables asociados con esta patología. Además, el tratamiento para el bruxismo suaviza la apariencia de la línea de la mandíbula haciendo que el rostro se vea más estilizado.
El bruxismo es el término médico con el que denomina a la acción de apretar y rechinar los dientes de forma inconsciente, ya sea mientras está despierto o dormido, lo que puede provocar dolor físico y problemas dentales graves.
Rechinar los dientes de forma crónica puede causar dolor de cabeza, dolor de oído, dolor facial e incluso migrañas. Los problemas dentales por bruxismo incluyen pérdida de esmalte dental, aumento de la sensibilidad dental y aplanamiento y / o astillado de los dientes.
Los personas que rechinan y aprietan los dientes mientras duermen con frecuencia se despiertan con dolor en la mandíbula. La hipertrofia del músculo masetero puede conducir a la aparición de una mandíbula cuadrada severa, otro efecto secundario del bruxismo.
El tratamiento médico estético para el bruxismo ha demostrado ser una opción de tratamiento ideal para atacar y tratar la actividad muscular excesiva. Muchos otros tratamientos, como los medicamentos antiinflamatorios y los dispositivos dentales no abordan la fuente del problema. Aunque los dispositivos dentales pueden proteger con éxito los dientes del daño nocturno para quienes sufren de bruxismo no son efectivos para detener los dolorosos efectos secundarios de rechinar los dientes.
Aplicación del tratamiento para bruxismo
Al inyectar pequeñas de producto directamente en el músculo masetero (el músculo grande que mueve la mandíbula), éste se debilita lo suficiente como para detener el rechinar involuntario de los dientes y apretar la mandíbula. El resultado es una relajación significativa del músculo y del desgaste de los dientes debido al rechinamiento. El daño a la articulación temporomandibular (TMJ) y los dolores de cabeza también se eliminan. El producto no afecta en absoluto los movimientos voluntarios, como la masticación y las expresiones faciales.
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